Es inevitable sentir algo de síndrome postvacacional al volver a estar inmerso en la rutina después de haber disfrutado de unos días libres disfrutando de la familia, amigos y un buen lugar. Algunas personas llevan bastante mal la incorporación a la vida cotidiana, desarrollando una depresión post vacacional que les sume en una profunda tristeza y malestar.
En Mial Salud te contamos todo sobre este síndrome y cómo afecta sobre todo a los más mayores, dándote, al mismo tiempo, algunos consejos para que se adapten de forma sencilla a rutina. ¡Conoce toda la información en el siguiente post! ¡Sigue leyendo!
¿Qué es el síndrome postvacacional?
Este síndrome se identifica con síntomas de presión en el pecho que sufren algunas personas cuando sus vacaciones se acaban. Estas emociones, dependiendo de la persona, pueden ser más o menos fuertes. Sin embargo, este síndrome no se trata como una enfermedad, es más bien un periodo de adaptación, que suelen padecer, sobre todo, las personas mayores.
Esto es así debido a que cuanto más mayores nos hacemos, más difícil se nos hace dejar atrás los momentos en los que hemos disfrutado a lo largo del año, por lo que la recuperación se vuelve cada vez más y más pesada.
La ansiedad como síntoma del síndrome postvacacional
El síntoma más común del síndrome postvacacional es la ansiedad, ya que el hecho de pensar en volver a la rutina tras disfrutar de unos días de desconexión proporciona un nudo en el pecho y mucha presión.
Esta ansiedad hace que la persona se agobie cada vez más, incluso es posible que sin haber terminado las vacaciones se sienta algo de inquietud por estar pensando en ese momento. A los síntomas de ansiedad se unen los de depresión, ya que los pensamientos se tornan tristes e incluso la persona puede volverse apática.
Disminución del rendimiento a causa del síndrome postvacacional
Una vez que se ha vuelvo a la rutina, los días de incorporación suelen ser los más duros. Es normal que los primeros días después de las vacaciones no seas capaz de concentrarte como es debido, pero no hay que poner una excesiva preocupación en este caso.
Este, aunque es el síntoma más común del síndrome postvacacional no debe preocuparte, ya que es una capacidad que se va recuperando poco a poco.
Consejos para afrontar el síndrome postvacacional en mayores
Debes mantenerte con una actitud positiva, aunque no tengas muchas ganas, ya que la gran mayoría de personas no se dan cuenta de lo poderoso que puede ser afrontar los problemas con un buen estado de ánimo.
Otro consejo que te damos es el de hacer algún cambio en tu vida, ya que ese nuevo aliciente empuja a seguir adelante. No hace falta que este sea un cambio radical, basta con que sea algo nuevo que motive a seguir, como un cambio de look.
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